Esta película de 85 minutos de duración trae consigo una nostalgia de la que para muchos es el mejor anime que se haya creado. Para hablar de la película es imposible no mencionar el gran éxito en taquilla que tuvo en Japón o la polémica en latinoamérica alrededor del rumor de que no se usarían las voces originales para dar vida nuevamente a Goku y compañía. Sin embargo, después de negociaciones, las voces de Mario Castañeda y René García fueron confirmadas complaciendo a miles de fans de Dragon Ball Z.
La trama de la película es desatada cuando el dios de la destrucción Bills despierta después de muchos años de letargo. Se entera que Freezer fue vencido por un Super Saiyajin y duda que el vencedor pueda ser el Dios Super Saiyajin que nunca ha logrado conocer. Entonces, realiza una visita a la tierra para conocer a este dios o destruir su planeta.
La película combina la animación clásica de Dragon Ball con la nueva y moderna animación japonesa, logrando así, una excelente e interesante propuesta. Ésta también tiene una exacta elección de colores que logran un gran atractivo visual. Los nuevos personajes y paisajes que se usan en esta aventura son frescos y a la vez clásicos, recordándonos en ocasiones al cine de Hayao Miyazaki (El Viaje de Chihiro, El Castillo Vagabundo).
El guión de esta cinta es sencillo y con mucho sentido del humor. Para los seguidores del anime, esto recordará a los inicios de la serie y para nuevos espectadores será interesante conocer a los personajes de una manera cómica y a la vez profunda. De hecho, la mayor parte del guión es comedia, a veces demasiado reiterativa, dejando el tercer acto para la acción. La historia tiene subtramas que nos llevan con varios personajes del manga pero en un momento nos desvían un poco de la acción principal hasta llegar al último tercio de la película. En él, las batallas son emocionantes y logran traer de vuelta el espíritu de Dragon Ball Z.
Dragon Ball Z: La Batalla de los Dioses cumple, siendo una película nostálgica, emocionante, con mucho sentido del humor y con un gran diseño artístico. (***1/2 de 5)
